Un mensaje de WhatsApp llegó al celular de Selena Sotelo Vargas. “Ya hice el nombre de Dios”, dijo. Eran las ocho de la mañana y su primer servicio del día fue comprar tela en Masaya y llevársela a un cliente en el municipio de Niquinohomo. Así empezó el ajetreado trabajo de esta mujer junto a su colaboradora en Prix Delivery un emprendimiento que brinda servicios de pedidos de comidas, paquetería, pagos de servicios básicos, compras abarrotería, mandados personales y viajes express.
Han transcurrido tres meses desde el siete de octubre del año pasado que la joven Selene de 30 años, y madre soltera, decidió iniciar el emprendimiento dirigido por mujeres. Ese día los nervios y temor no faltaron, pero estos fueron vencidos por las ganas de trabajar y deseo de salir adelante. A pesar de haber pasado por varios emprendimientos, donde no le fue tan bien, convirtió esas experiencias en enseñanzas y no se detuvo, al verse desempleada surgió la necesidad de crear un servicio de delivery realizado por mujeres.
“Surge la idea de ver en mi ciudad (Niquinohomo) que todos los domicilios eran repartidos por varones y yo me puse a pensar un día qué pasaría si yo abría un emprendimiento donde nos enfocarnos a emplear mujeres, ya que tenemos la cualidad de ser detallistas y cuidadosas por ejemplo seleccionar bien las verduras al momento de comprar para que el cliente tenga alimentos frescos. Entonces inicié y pronto llegó otra muchacha con licencia de conducir para que trabajáramos”, sostiene la emprendedora.
Un trabajo que pocas mujeres realizan
“La pensé y repensé porque no era un mundo laboral para mujeres y al principio me daba un poco de pena que me mirarán con un bolso haciendo reparto, la gente me miraba rara, después se me quitó la pena y gracias a Dios ahora me conocen como la chavala de los delivery, siendo nuestros principales clientes mujeres”.
En nuestra jerga nicaragüense “Prix” es una palabra muy usada que tiene sentido de amistad y confianza, razón por la cual Selene no dudó en bautizar como Prix Delivery su emprendimiento. El negocio opera principalmente en el municipio de Niquinohomo y pueblos blancos aledaños como: Diría, Diriomo, San Juan de Oriente, Catarina, Nandasmo, Masatepe y en la ciudad de Masaya. Actualmente junto a Selena trabaja Rosa otra mujer que forma parte de Prix Delivery. Sin embargo, debido a que trabajan hasta en horas de la noche por la demanda y además por motivos de seguridad también tiene un colaborador para ciertos domicilios.
“Gracias a Dios con este emprendimiento nos ganamos la vida, en mi caso pago los estudios de mi hijo de 11 años, los gastos del hogar y la comida. Tenemos bastantes clientes a quienes nunca les hemos fallado, ya que hemos cumplido los servicios en tiempo y forma, con respeto, amabilidad e higiene. Espero que sigamos creciendo y tener más colaboradores en otros municipios, ya que trabajamos con bastantes restaurantes de diferentes lugares”, menciona.
Según Selene Sotelo en su pequeño negocio también tiene el servicio de Pick Up o viajes expresos hasta donde el cliente deseé, para lo cual utilizan motocicletas montañeras. A este emprendimiento pueden sumarse más mujeres que quieran trabajar con responsabilidad, comunicándose con ella al número que aparece en la página oficial de Prix Delivery.